Cada bebé es único y sus padres poco a poco irán descubriendo esa infinidad de detalles que le hacen especial y que a su vez les facilita su cuidado y comunicación.
Es por esto que profundizaremos en el maravilloso mundo del recién nacido, conociendo cuales son sus estados de comportamiento normales y por qué se presentan.
Es importante para los padres y cuidadores lograr comprender como se comporta su bebé para así poder responder de una manera más acertada a sus necesidades, brindándole un ambiente más positivo, seguro y confortable.
Existen 6 estados del comportamiento y el bebé irá pasando de uno a otro de una forma desorganizada u organizada según su madurez y nuestro nivel de respuesta a sus necesidades.
• Sueño profundo: se presenta cuando el bebe está dormido profundamente, y no presenta movimientos musculares, está completamente relajado. Se dice que en este estado es cuando crece en peso y talla.
• Sueño ligero: se presenta cuando el bebé aún dormido presenta movimiento muscular, se sonríe, presenta movimiento de los ojos aún con los parpados cerrados y está más sensible a los ruidos externos por lo que se sobresalta con facilidad. En esta fase se menciona que el bebé asimila toda la información que recibió durante los periodos de alerta.
• Transición: es el periodo que se presenta entre los estados de alerta y los del sueño.
• Alerta tranquilo: es cuando el bebé se observa despierto, con los ojos bien abiertos observando todo alrededor, vigilando, y analizando toda la información que percibe a través de todos sus sentidos y aprendiendo del mundo que le rodea; hay poco o nulo movimiento muscular. Este estado es ideal para estimular al bebé, cantarle, realizarle masaje, o cualquier actividad que fomente el vínculo, la interacción y el aprendizaje.
• Alerta Activo: el bebé está despierto, pero se observa inquieto, puede presentar movimiento moderado o vigoroso en sus extremidades, probablemente demandando atención para que alguna de sus necesidades físicas o psicológicas sea satisfecha.
• Llanto: es el mayor grado de desorganización del bebé, en este punto es imposible la comunicación, ya que mantiene los ojos cerrados, y el llanto intenso le impide escucharnos, además presenta agitación vigorosa de las extremidades y la cabeza. Está demandando atención, es su forma de pedirnos ayuda para sus necesidades no satisfechas.
Al inicio los bebes no pueden autorregularse para pasar de un estado a otro, por lo que necesitan de los adultos para lograrlo de manera eficaz. Es por esto que lo más importante es que la persona que se encuentra atendiendo al bebé, ya sea su madre, padre u otro cuidador, se encuentre tranquilo aunque él esté llorando, para transmitirle serenidad y lograr entrar en contacto con sus sentimientos.
Luego podremos comenzar a descartar los motivos del llanto, ya sean necesidades físicas o necesidades emocionales, para poder atenderlas de manera más oportuna. Esto le enviará un mensaje al bebé de que la persona que está a cargo se está tranquila y a cargo de la situación, atendiendo sus necesidades y que se encuentra en un lugar seguro. De manera que el bebé sienta que es respetado y amado en todo momento.
Master. Sidey Zuñiga E-7729
Enfermera Pediatra con énfasis en Neonatología.
Impronta Asesoras de Maternidad y Paternidad
www.facebook.com/imptontaasesoras
improntaasesoras@gmail.com
